Frecuentemente se combina la educación para la salud con otras medidas para mejorar el desarrollo y bienestar de la comunidad, generalmente se incluyen programas de capacitación en algunas actividades lucrativas. Además de las actividades de aprendizaje que ofrecen las instituciones promotoras, las personas adultas también adquieren conocimiento sobre salud, en grupos locales de auto ayuda, en grupos comunitarios, en el trabajo y en organizaciones no formales. También obtienen información de manera informal a través de la televisión o anuncios publicitarios, o a través de sus padres y amigos. La educación es un determinante en la salud, quienes están más predispuestos a tener mala salud, no son únicamente los más pobres, sino quienes tienen menor nivel de educación. Es más, tanto en los países en vía a desarrollo como los países desarrollados la educación informal pueden conducir a mejorar la salud y bienestar general de modo significativo.
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